El Zombie Ernesto


Cuando era humano, Ernesto jugaba en un equipo de rugby. 
Era violento, basto, mal educado y no destacaba como buena persona.
Pero un día, cuando un zombie lo infectó por accidente mientras entrenaba solo, su vida y su personalidad cambiaron: 
Le repugnaba ver como era antes de ser zombie, pero le repugnaba aún más su naturaleza actual.
Por eso se apartaba con miedo de los de su clase y se refugiaba en el bosque, comiendo cerebros de perros vagabundos y de algún que otro jugador de rugby...
Como veía que esos cerebros eran poco consistentes y siempre se quedaba con hambre, un día entró en una librería y se zampó el cerebro de la dependienta.
Le gustó muchísimo, pues era un cerebro sano, inflado de conocimiento y sabroso.
Pero cuando acabó de comérselo vio el cuerpo de la mujer inerte, roto y frío, lleno de sangre...
Jamás ha vuelto a querer comer un cerebro inteligente.
Intenta llevar una estricta dieta a base de cerebros podridos, negros, pequeños y vacíos de gente despreciable. 
Por eso el pobre siempre tiene hambre...






Muñeco de papel
Impresión de alta calidad
A4 Papel Blanco-Roto tipo cartulina

Sin recortar
*Viene con piezas metálicas para unir las articulaciones*










No hay comentarios:

Publicar un comentario